El Santuario de Nuestra Señora Rosary de NamYang, conocido también como la «Montaña del Rosario», se considera un lugar en memoria a los mártires católicos que conmemora la gran persecución de Pyong-in de 1866. El 7 de octubre de 1991, Namyang fue declarado lugar sagrado en conmemoración de su martirio y como testimonio de su fe. El célebre arquitecto Mario Botta diseñó la catedral, construida con la esperanza de la unificación y la paz entre las dos Coreas. El estudio de diseño de iluminación líder de Corea del Sur, Bitzro & Partners, recibió el encargo de diseñar la iluminación de la catedral.
En las rejillas de madera se instalaron proyectores Parscan con las distribuciones luminosas spot y narrow spot. Los proyectores se orientaron hacia el crucifijo y las dos obras de arte de gran formato, ubicadas al pie de las torres, para acentuarlas en el espacio y captar la atención de los visitantes que caminan hacia el altar mayor.
Un amplio espacio recibe a los visitantes que entran en el vestíbulo principal de la catedral. El techo arqueado está revestido con láminas de madera de arce, entre las cuales se encuentran los tragaluces que dejan pasar la luz natural. La luz cambia en las estaciones del año y con las horas del día, creando un armonioso vínculo entre el ser humano y la naturaleza. El espacio entre ambas torres permite la entrada de un haz de luz natural que atrae la atención de los visitantes hacia el altar mayor.
Los bañadores de pared Quintessence, con LED de 16W y 3000K, acentúan el contraste entre el frío muro de hormigón y las cálidas paredes de ladrillo.
El bañado de pared garantiza una distribución uniforme de la luz en la pared de la galería, y evita que se proyecte la sombra de los visitantes en las cartelas o las obras de arte.
La luz solo se aplica en el lugar preciso donde se la necesita, y donde lo requiere la percepción humana. La tecnología de lentes Spherolit de Parscan dirige la luz de manera precisa y homogénea, y sin dispersión. A pesar de la altura de más de 10 metros, las obras de arte se iluminan con precisión, y con el máximo confort visual para los visitantes.
La catedral se encuentra al sur de la ciudad, en un terreno montuoso amplio y verde, construida en un pequeño valle entre colinas. La cruz se presenta a conciencia de una manera discreta, y solo se encuentra grabada en la parte superior de la torre. La catedral no solo está al servicio de la celebración de la misa católica y de los creyentes, sino también al servicio de los residentes como parque comunitario. Debe reavivar la tradición de la antigua basílica, un gran edificio público con numerosas funciones y un lugar para celebrar reuniones públicas. Los fines de semana puede verse a las familias haciendo un picnic en el parque colindante.
Las dos torres revestidas de ladrillo dan la bienvenida a los visitantes que ascienden por la colina. Los proyectores Lightscan iluminan estas torres, que se elevan hacia el cielo como un halo de paz y de esperanza.
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