Magia y precisión

Consideración y prudencia

La arquitecta Torzo realizó su ampliación respetando a conciencia este emplazamiento histórico, y teniendo en cuenta la tradición arquitectónica medieval de la ciudad. Por un lado, se trataba de la integración conceptual del conjunto de edificios existente mediante un muro exterior extraordinariamente monumental, compuesto de unos 35.000 ladrillos en forma de diamante. Por otro lado, había que realizar el diseño de un nuevo edificio, el «Ala 19». La arquitecta describe la arquitectura de exposiciones del «Ala 19», de cuatro plantas diseñadas como una escenografía, como una «ciudad en miniatura», como un «eco construido del paisaje urbano» de Hasselt.

Una iluminación flexible para su diversidad espacial

La iluminación fue diseñada en estrecha colaboración con el diseñador de iluminación belga Ben Boving: «Era importante disponer de un alto grado de flexibilidad para la iluminación del arte contemporáneo en todas sus formas.» El complejo diseño espacial del nuevo centro de exposiciones supuso un desafío. Cada espacio tiene un ambiente con un carácter propio, potenciado mediante la luz.

Una iluminación precisa a 14 metros de altura

En la sinuosa sala de exposiciones «Callejón», Ben Boving utilizó proyectores Light Board de ERCO, con una distribución luminosa de haz intensivo, a fin de lograr un efecto luminoso poético. La luz, dirigida con precisión, cae desde el techo por las paredes como una «cascada». Un sistema óptico específico proyecta la luz con exactitud y sin dispersión sobre la superficie a iluminar. De este modo, la luz solo se aplica donde se la necesita, es decir, con la máxima eficacia, lo cual representa un pilar de la iluminación sostenible.

En la denominada «Torre», la luz natural y la artificial interactúan para crear un efecto por el que parece que la luz natural incidiera desde arriba en esta sala de exposiciones de 14 metros de altura. Para lograr este efecto, se instalaron en el techo rejillas de punto de montaje para los bañadores Opton de ERCO, que se revistieron hábilmente con placas transparentes de politetrafluoroetileno y fibra de vidrio. Los visitantes no ven la fuente de luz, sino que la perciben como si entrara luz natural. La luz solo se aplica donde lo requiere la percepción humana, y donde favorezca al concepto de la exposición complementando a la luz natural.

Una estructura luminosa adaptable a exposiciones futuras

Una característica especial de las nuevas salas de exposiciones del Z33 son los techos de casetón inspirados en el diseño la de antigua Roma. El diseñador de iluminación Boving integró en algunos casetones puntos de montaje para los proyectores Parscan de ERCO. Este tipo de luminaria convenció también por su estética. «El cuerpo redondo de Parscan crea un bello contraste con los casetones piramidales», nos dice Ben Boving. Se integraron 270 salidas de conexión de uso flexible en toda la zona de exposiciones: «Esto permite a los comisarios diseñar un plan de iluminación específico para cada exposición.»

Genius loci – el espíritu protector del lugar

Esta iluminación minuciosamente planeada es característica de la ampliación del Z33, que se realizó de una forma exquisitamente funcional, y que fue finalista del premio Mies van der Rohe en 2022.
Así, con mucha precisión y un toque de «genius loci», se ha creado un espacio para exposiciones serenamente mágico, que logra ser una arquitectura realmente espectacular sin necesidad de imponerse.